lunes, 30 de mayo de 2016

CORPUS CHRISTI DESDE LA LEJANÍA


Mañana de luz, olor y color: jueves de Corpus

Por Juan Carmelo Luque Varela, Cronista oficial de la Villa
<<…La lejanía es de limón y violeta, / verde el campo todavía…>>
Me viene a la memoria estos versos de A. Machado (Canciones a Guiomar), al recordar desde la lejanía el Corpus de mi pueblo. Porque, cuando se hace una pausa en lo cotidiano pierdes el sentido de lo plástico y tangible que en ese momento ocurre, Aunque siempre queda el recuerdo para mirar a través de la ventana de la mente.

La Hermandad Sacramental de San Miguel Arcángel y Ntra. Sra. del Buen Suceso, también este año, modificó el recorrido de la procesión del Corpus Christi  al estar en obras la arteria principal del pueblo, utilizando en su bajada hacia el Prado la calle Cervantes. Pero esto no lo vi yo al estar ausente. –Aunque tampoco hace tantos años que por dicha calle  dejase de transcurrir la procesión-. Lo que sí veré siempre, porque lo tengo registrado en la memoria del tiempo, es esa  brillante y luminosa  mañana de jueves   de Corpus  en Castilleja del Campo.
Un  jueves donde la luz se hace mayúscula y todo lo ocupa con un sol de blancura que se refleja en las encaladas  paredes. Un jueves donde el aire perfila colores en una imaginable paleta renacentista, temple de primavera que se resiste a entregarse en los brazos del verano que se acerca. Un jueves donde el cielo, recortado por los aleros a contraluz, presenta toda su inmensa gama de azules que van desde el cobalto al celeste. Cielos de luz, nada más que luz en un jueves de Corpus. Luz y color derramándose sobre claridades eternas. Una luz que cumple años ajena al gris de lo cotidiano y de la rutina, como un paréntesis de juncia y romero que, trasminando sus olores, nos muestra otra historia de nuestro pueblo.
Y cuando la procesión va pasando, la luz, el color y el aroma de este jueves, envueltos en dulzonas volutas del incienso, se van fijando en la memoria.  Un día, yo cerré los ojos y retuve esta imagen para siempre: una mañana de luz, olor y color que estará dentro de mi mente, aunque esté fuera de mi vista.

Jueves de Corpus Christi, un Dios todo vino y todo pan, todo racimo y espiga; sencillez, que cuando sale a la calle se siente mejor si está rodeado de lo sencillo, de lo que el pueblo improvisa y del campo. ¿Hay algo más sencillo que el campo? Pues ahí están la Sangre y el Cuerpo de Cristo en esas viñas, en esos trigales; porque todo lo del campo  está en vecindad con Él. Uvas y espigas amigo, esta es la síntesis de Dios. Nada más que eso… Y nada menos.


Opinión del cronista 026
Castilleja del Campo, lunes 30 de mayo de 2016

martes, 24 de mayo de 2016

OTRO ÉXITO DEL GRUPO DE TEATRO


Unos “Pasos” que dejaron huella

Por Juan Carmelo Luque Varela, Cronista oficial de la Villa
El Grupo Municipal de Teatro Aficionado de Castilleja del Campo consiguió nuevamente el respaldo de su público, con la representación de unos entremeses del Siglo de Oro.
El estreno coincidió cuando finalizaba el segundo mes de una primavera que ya   acumulaba más de 200 litros/m2 de lluvia. En ningún modo ha sido el remedo de las pasadas y  secas estaciones de otoño e invierno.  
Fue el sábado 21 y el día siguiente,  domingo 22 de mayo, cuando este grupo de aficionados volvieron, una vez más, a revalidar su puesto sobre las tablas de un escenario  y cosechar otro  éxito por su trabajo.
Las personas que componen el elenco artístico de este grupo de teatro tienen consolidada una buena y fluida  comunicación con la dirección,  que se hace tangible en el montaje de  cada nuevo proyecto de teatro que realizan. Este es el caso de la representación y estreno de  estas cinco historias cortas que, el clásico y sevillano autor Lope de Rueda, escribió  bajo la denominación  “PASOS”.

La directora del grupo, Cynthia Luque que también llevó a cabo  la adaptación del texto, remitió a Cronista de la Villa las siguientes declaraciones:
<<Afrontar un clásico no es fácil, sobre todo cuando el grupo es aficionado. El lenguaje del siglo XVI dista mucho del que utilizamos  hoy en día, por ello he intentado adaptar el texto a un leguaje más cercano y actual que facilitara el trabajo a los actores. Aún así había que respetar ciertas normas del teatro del Siglo de Oro. Sinceramente el resultado obtenido ha superado mis expectativas.
El grupo ha hecho un trabajo excelente y demuestra, un año más, su valía y su pasión por el teatro. Ahora me corresponde agradecer a todos, su confianza ciega en mí, su entrega y ese estar siempre dispuestos a llevar a cabo mis indicaciones y todo lo que tengo dentro de la cabeza. Sé que para algunos esta obra ha supuesto un gran reto y sólo puedo deciros que lo habéis superado con creces.
Quiero agradecer también al público su repuesta, asistencia y el cariño con que nos acoge. Espero que hayáis quedado satisfechos y sorprendidos con los actores y su representación, un año más>>.


Pero vayamos  paso a paso, por orden de intervención –como se dice en el argot de teatro-, a repasar los cinco “Pasos” representados por el Grupo Municipal de Teatro Aficionado de Castilleja del Campo.

LA GENEROSA PALIZA. Nos muestra un malentendido, provocado por la aburrida y vacía vida de un señorito, que descargó su ira en las cuatro doncellas de su casa, a quienes  hizo pagar su propio error.
Magnífica la actuación coral de sus protagonistas: Luis Carlos Luque, Margarita Mateos, Ana García,  Leonor Reinoso y Nena Monge.

LA MÁSCARA. Ya en el siglo XVI era notable el movimiento demográfico en nuestro país con la llegada importantes y ricos personajes, este es el caso de la historia breve que Lope de Rueda tituló “La Máscara”. Una comedia con tintes de humor negro donde la señora Salcedo, que a arribó a las costas españolas con su criada Alameda, se burla de ella aprovechando la inocencia de la fámula.
Dos personajes, representados por María Pichardo y Melisa Holtz que, sin más atrezos que su interpretación,  llegaron y conectaron con el público.

CORNUDO Y CONTENTO. Una comedia de amor y engaño que se repite desde los albores de la vida. Esta historia cuenta como Martín de Villalba, un personaje bonachón y simplón,  es convencido por el primo de su esposa para que tome un purgante, esto hará que mejore la salud de su mujer. Al menos eso le dice ese primo que no es más que el amante de ella.
Fran Rivera, en el personaje de Martín, realizó un extraordinario trabajo y cambios de registros que ha destacado como la revelación del montaje de este año. Mención aparte merece la interpretación de Pilar Olvido en el papel de la doctora Lucio, Cynthia Luque encarnó a Bárbara (la esposa de Martín), José Mari Delgado como el amante, y la presentación, por primera vez en escena, de Rufino Suárez como el “Chico”.  


LA TIERRA DE JAUJA. Es la clásica  comedia de la picaresca del Siglo de Oro español.
Desnuda y sin decorados, esta comedia consigue comunicarse con el público gracias a la fuerza y la frescura interpretativa de sus personajes, representados por Amalia Flores, Alicia Gómez y Manuel Muñoz.

LAS ACEITUNAS.  Un enredo familiar creado por el precio de venta de unas aceitunas cuyos olivares aún no estaban plantados.
Fluida y dinámica interpretación de Manuel Monge,  Laura Rodríguez, Ramona Luque y Cynthia Luque, que con una exquisita interpretación consiguieron  empatía y  conexión con el público.


Cinco pasos hábilmente enlazados que han dejado sus huellas sobre las tablas del Centro Cultural María Moliner.
Todos ellos fueron muy aplaudidos conforme iba terminando cada representación. Y en el saludo final, el lleno absoluto del día de estreno y el aforo del siguiente, el público puesto de pie valoró y premió el trabajo de los actores y actrices con una cerrada y larga ovación. Es un reconocimiento por la entrega, la fuerza y el darse al público en una genial y artística interpretación, que este grupo  tiene  más que merecido.
¡Enhorabuena y felicidades a todas y todos!


Crónica 080. Castilleja del Campo, martes 24 de mayo de 2016

miércoles, 18 de mayo de 2016

ESTRENO DEL NUEVO MONTAJE DE TEATRO


Otro clásico en el Teatro del Centro María Moliner

Por Juan Carmelo Luque Varela, Cronista oficial de la Villa
Tras siete meses de trabajo el Grupo Municipal de Teatro Aficionado de Castilleja del Campo presenta su nuevo montaje: cinco entremeses o pasos del autor sevillano del Siglo de Oro Lope de Rueda, con textos adaptados por Cynrthia Luque  que a su vez es la directora del montaje. Un grupo de mujeres, hombres y jóvenes de nuestro pueblo que ganándole tiempo a sus trabajos, a sus estudios y a sus familias lo invierten en  arte y  cultura, lo dedican al  teatro. Dieciocho son las personas, entre actrices y actores, además el equipo técnico que está detrás: peluquería, maquillaje, tramoyistas, iluminación y sonido, que componen esta agrupación artística.
La representación de estas cinco pequeñas historias es el resultado de su trabajo altruista, por afición y amor al teatro. Ahora le corresponde al respetable sopesar y valorar la labor que ellos han desarrollado y que ahora presentan  en estreno absoluto en el Teatro del Centro Cultural maría Moliner.

*La Generosa paliza. Actúan: Luis Carlos Luque, Margarita Mateos, Ana     García,  Leonor Reinoso y Nena Monge.
*La Máscara. Interpretan: Melisa Holtz y María Pichardo.
*Cornudo y contento. Con Francisco Rivera, Pilar Olivo, Cynthia Luque, José Mari Delgado y Rufino Suárez.
*La tierra de Jauja. Intervienen: Amalia Flores, Manuel Muñoz y 
Alicia Gómez.
*Las aceitunas. Con Manuel Monge, Ramona Luque, Laura Rodríguez y Cynthia Luque.

Cinco pasos para pasarlo bien. La diversión y la risa están aseguradas porque así  es la comedia de Lope de Rueda: amores frustrados, sana alegría, algo de picaresca y  mucho  humor.
Con este su cuarto montaje, el Grupo Municipal de Teatro se presenta a los seguidores, aficionados y aficionadas de tan arraigada tradición por el teatro, para que  disfruten con esta nuieva puesta en escena.

Teatro del Centro Cultural María Moliner
Sábado 21 a las 20:30 horas
 Domingo 22 a las 18:00 horas.


Comunicado local 061
Castilleja del Campo, miércoles 18 de mayo de 2016

miércoles, 11 de mayo de 2016

CURIOSA HISTORIA DE FINALES DEL SIGLO XV


Posible huella de un conquistador en Castilleja del Campo

Por Juan C. Luque Varela, Cronista Oficial de la Villa
Nuestra localidad, que hunde sus raíces en la cultura tartesia asentada en Tejada la Vieja entre fines de siglo XII a. C. y mediados del siglo VI a. C., y se precia de haber sido turdetana, romana y árabe, tomó el nombre de Casti[e]lla de Albençameit tras la reconquista por las huestes de Alfonso X en 1253. Su nuevo topónimo, transformado en poco tiempo en “Castilleja del Campo”; 250 años después de su reconquista, y según la investigadora María del Carmen Martín Rubio, quedaría vinculado a la biografía de uno de los más afamados conquistadores de las Indias españolas.

Para doña María del Carmen, a finales del siglo XV, entre 1491 y 1493 más concretamente, llegó, con idea de afincarse en Castilleja del Campo, el matrimonio compuesto por Martín de Alcántara y Francisca González y Mateos, junto con un hijo de ella, de unos catorce o quince años de edad. Al poco, fruto del citado matrimonio nació otro varón, al que pusieron por nombre Francisco Martín(ez) de Alcántara y González (desgraciadamente, este dato no podemos corroborarlo, puesto que el Archivo Parroquial de Castilleja del Campo sólo conserva registros documentales a partir de mediados siglo XVI). No se sabe con exactitud, pero es probable, que el hijo mayor, también de nombre Francisco, conociera el nacimiento su hermanastro, catorce o quince años menor, y le viera crecer durante sus primeros meses y años de vida porque, según se dice en los textos de todos los cronistas, sintió por él un gran afecto.
Sin embargo, según el historiador peruano Raúl Porras Barrenechea (1897-1960), afirma en una de sus obras que, Francisco Pizarro vivió  en Trujillo hasta los catorce o quince años, es decir, hasta 1492 o 1493. Desde entonces, como ya se ha señalado, parece que radicó a unos treinta kilómetros de Sevilla   con su madre, el marido de esta y el hijo pequeño del matrimonio, Francisco Martín de Alcántara,  en un pueblo llamado Castilleja del Campo en la zona de Sanlúcar de Alpechín, hoy Sanlúcar la Mayor.
Que el segundo hijo de Francisca naciera o no en Castilleja no tiene relevancia alguna para esta historia. Aquí, de lo que se trata es de sacar a la luz que, posiblemente, un destacadísimo conquistador de las Américas fue, por unos años, vecino de nuestro pueblo.

Francisco Pizarro se sabe que nació en Trujillo (Cáceres) el 16 de marzo de entre 1476 y 1478 (las diferentes bibliografías difieren en el año su nacimiento [1473, 1476 y 1478], pero coincide en el día y en el mes). Hijo ilegítimo del capitán de los tercios españoles don Gonzalo Pizarro y Rodríguez de Aguilar (1446-1522), quien sirvió en las campañas de Italia bajo el mando de Gran Capitán, Gonzalo Fernández de Córdoba y Aguilar, y de la menesterosa Francisca González y Mateos, dama de recámara de la noble doña Beatriz Pizarro, tía de don Gonzalo. Se cree haber dado con la supuesta partida de bautismo de Pizarro en la que se le consigna como Francisco González, pues no llevaría el apellido de su padre hasta los doce años de edad.
Se crió con su madre en casa de sus abuelos maternos, familia conocida como “los Roperos”, labradores pecheros de Trujillo. Su madre, cumplidos treinta años, contrajo matrimonio con el referido Martín de Alcántara. A partir de entonces se trasladó por un tiempo, o definitivamente, a vivir con su marido y su hijo Francisco, que ya tenía el apellido Pizarro, a Castilleja del Campo, pueblo situado a unos treinta kilómetros de Sevilla, como ya se ha señalado.

Francisco Pizarro iría con frecuencia a Sevilla, a pesar de que en aquella época el viaje hasta la ciudad suponía cabalgar muchas horas o viajar durante un día entero en incomodas condiciones por malos caminos; pero a Pizarro, que era joven, fuerte y lleno de ideales, no debían importarle las molestias del viaje, ya que tenía muy claro que ni en Trujillo, ni en Castilleja, se hallaban a su alcance los medios necesarios para iniciarse en la carrera de las armas y encontrar la ruta que le conduciría a su dorado objetivo. Es de suponer que el joven Pizarro debió quedar impresionado la primera vez que llegó a Sevilla y vio un mundo tan diferente al que hasta entonces había conocido, sin duda lugares de corte feudal en los que apenas existía clase media, ya que solo había poderosos señores y labriegos pobres.

Si bien algunos biógrafos dicen que Francisco, a la edad de diecisiete años, se alistó en los Tercios españoles, que a las órdenes del Gran Capitán luchaban en las campañas de Nápoles, otros aseguran que fue a los veinte. Algunos incluso afirman que, en 1499, partió con Alonso de Ojeda en su primer viaje a las Indias, formando parte de una expedición organizada por dicho navegante.
Sea como fuere, y siempre siguiendo la teoría de doña María del Carmen, es de suponer que Francisco Pizarro pasó su juventud entre Castilleja del Campo y Sevilla, hasta que en 1495 marchara a los Tercios. A su vuelta de Italia, a principios del siglo XVI, llegaría para despedirse de su madre y de su pequeño hermanastro Francisco hasta que, en 1502, embarcara junto a fray Nicolás de Ovando, que partía como Gobernador de la isla de La Española. En 1509 se alinea con el grupo de Alonso de Ojeda, que se disponía a poblar tierra firme y participó en la fundación de las villas de San Sebastián de Urabá y de Santa María la Antigua del Darién, en la actual Colombia.
Años más tarde, su hermanastro Francisco Martín(ez) de Alcántara también marchó en busca de fortuna a América donde, desde el principio de la conquista del Perú, fue uno de los hombres de mayor confianza de Pizarro. Francisco Pizarro era primo por vía paterna del conquistador del imperio azteca, Hernán Cortés.

NOTAS:
En una biografía de Pizarro publicada en internet:<<Busca biografías>>, dice que Francisco, que no destacó por su interés en la cultura, fue obligado por sus abuelos maternos a cuidar cerdos y otros animales. Se cuenta que a los pocos años los animales a su cuidado contrajeron una grave enfermedad y, por temor a ser culpado escapó,  con tan solo 15 años, hacia Sevilla, pero sin indicar su paradero final. 
Por otro lado, Cronista de la Villa se ha limitado a parafrasear la obra “Francisco Pizarro, el hombre desconocido”, sin tener datos que atestigua  la noticia que hemos planteado aquí. En este sentido, desconocemos la procedencia y la fuente de información de la Sra. Martín Rubio, para documentar que Francisco Pizarro vivió en Castilleja del Campo entre 1491 y 1502, con las ausencias descritas. 

BIBLIOGRAFÍA
MARTÍN RUBIO, Mª. CARMEN.  “Francisco Pizarro, el hombre desconocido”. Madrid, 2014.


Historia 045. Castilleja del Campo, miércoles 11 de mayo de 2016

viernes, 6 de mayo de 2016

EN EL PRIMER TERCIO DE LA PRIMAVERA


Abril, un mes  de encuentros, convivencias y viajes  sociales

Por Juan Carmelo Luque Varela, Cronista oficial de la Villa
Finalizó el primer tercio de una estación que comenzó con frentes de tormentas y generosos soles de abril, que lograron dorar las espigas de pan, en las aún  verdes cañas de los trigales. Campos de olor,  luz y color, donde la perdiz, el chamariz y la codorniz ensayaban sus conciertos de amor. Esta etapa primaveral sirvió de escenario para  enmarcar unos eventos que se celebraron  en Castilleja del Campo.

Apenas comenzaba abril, en los días 4, 5 y 6, el Ayuntamiento y la Asociación de Mayores “Fernandillo” de la localidad, organizaron un viaje cultural y de naturaleza a la provincia de Cáceres en Extremadura. Más de 35 vecinos disfrutaron en las visitas a localidades como Plasencia, Guadalupe y el Monasterio de Yuste. Y en un acercamiento con la naturaleza, contemplaron la florida belleza que presenta el plantío de cerezos en el valle del Jerte y sus pequeñas poblaciones rurales de la comarca.
En la misma línea de turismo cultural, otro viaje de cercanía, el día 26 y organizado por Prodetur de la Diputación de Sevilla, otros tantos ciudadanos y ciudadanas de nuestro pueblo, se acercaron a la ciudad de Alcalá de Guadaíra. Esta vez, en un intensivo medio día, recorrieron algunos monumentos del rico y extenso patrimonio cultural de la localidad. Entre ellos el patio del Ayuntamiento, edificio construido en 1766 sobre los cimientos de un antiguo hospital de beneficencia. La parroquia de San Sebastián y la ermita  de la Virgen del Águila, patrona de Alcalá. La fortaleza árabe construida sobre cimentación romana y el museo del pan ubicado en una antigua harinera alcalareña. Finalmente, y donde quedaron altamente impresionados, visitaron el Auditorio Riveras del Guadaíra. Un teatro, cuyo aforo  ronda las 900 butacas, donde los alcalareños y foráneos disfrutan de espectáculos como óperas, zarzuelas y grandes conciertos.  En el trayecto que les acercaría al hotel Oromana para el almuerzo, el tren urbano en el que se desplazaron los turistas pasó por el puente del Dragón, construido en 2007 según el proyecto del arquitecto José Luis Manzanares inspirado en la obra de Gaudí. “El Guardián del Castillo”, como es conocido en la localidad, fue elegido por votación popular de los alcalareños de entre varios diseños.


Tres días después de aquel viaje al Valle del Jerte, el sábado día 9, la Agrupación Parroquial de Ntra. Sra. de los Dolores organizó una fiesta benéfica. Tapas y bebidas, cafés y pastelillos, música y canciones fueron los ingredientes de aquella jornada destinada para recaudar fondos para la Agrupación. De ello, en la publicación del día 12 de abril, Cronista de la Villa  dio puntual información.

Cuando se cumplía el primer mes de la primavera, una jornada intercultural enmarcada en el Programa Foro Joven,  que se celebró el pasado sábado día 23 de mayo, sobrepasó todas las expectativas de los asistentes y visitantes dada la complejidad del evento para una localidad como la nuestra de tan corto presupuesto. El artículo anterior a este, publicado  el día 26 de abril, es un relato de las intensas horas de aquella jornada.

El sábado siguiente otro encuentro, que a pesar de tener alguna afinidad, se distancia del  anterior no menos de 50 años de una vida. Si en aquel se celebró un encuentro entre culturas donde predominaba el respeto y la tolerancia, en este otro fue una convivencia donde la amistad ya se vive por doradas primaveras de  madurez.
El último sábado de abril y con el epígrafe  “Primavera 2016”, la  Década 1945-1955 celebró su convivencia anual, encuentros que este año celebra su 5ª edición desde que el 30 de septiembre de 2012 se reuniera por primera vez. Un encuentro de amigos de la infancia con su pequeña patria que les vio nacer, con sus raíces, sus recuerdos y donde fomentar la amistad es la base primordial. Y como es primavera lo celebraron en el entorno natural del arroyo de Castilleja. 
Como despedida del mes, el día 30 amaneció brillante y soleado, ideal para pasar un día de campo. Al menos es lo que esperaban. Poco a poco fueron llegando los convocados y, como es costumbre, los saludos y abrazos entre los que reciben aquí a quienes vienen de fuera. Así hasta completar la lista de los que confirmaron su asistencia, que para este encuentro solamente acudieron el 50% de la nómina de estos decanos. Quizás la fecha no fue la indicada, los compromisos sociales, las comuniones y las celebraciones como la feria de Sanlúcar,  San Isidro y el Rocío causaron el absentismo en muchos amigos. Como siempre brindaron por todos los amigos: los presentes los que no pudieron venir y los que ya no volverán.
En este encuentro reinventaron aquella antigua tradición de las “Giras”. Pequeñas  excursiones a Guadiamar (río de Sanlúcar), a Tejada, a Chichina, etc., donde se compartía las viandas que cada excursionista llevaba. Aquí se hizo igual pero con un desmesurado derroche de cantidad y calidad.


No llevarían 3 horas instalados en el terreno de la romería cuando una tormenta primaveral, de las que hablábamos a principio, cubría los tejados de Paterna y Escacena y amenazaba por acercarse a nuestro arroyo. Como así ocurrió.
Con la madurez que dan los muchos años, la Década tenía previsiones hechas para cualquier incidencia. Así, mientras el grueso de personal desmontaban y recogían el campamento, dos de ellos se adelantaron al pueblo para cuando llegasen ya tuvieran preparado el recinto ferial para acogerlos.
Instalados a cubierto de una lluvia que duró el tiempo de hacer la mudanza, continuaron su convivencia que remataron con varios tipos de tartas, otros dulces y con cinco docenas de petacas, todo rociado con chocolate a la taza.
Para finalizar, un broche cultural muy especial. Caroli Moreno Madrigal regaló a los presentes un  lírico relato que tituló “Recuerdos de mi niñez”. Una semblanza de sus primeros  años que embargó los sentidos  y despertó la añoranza de todos aquellos fueron niños alguna vez.
Allí terminó  el V Encuentro de la Década 1945-1955 de Castilleja del Campo.


Noticias locales 061
Castilleja del Campo, 6 de mayo  de 2016