Crónica de la
restauración de la imagen
No hay mejor fecha
que hoy, 29 de septiembre día de San Miguel Arcángel, para hacer pública esta
memoria sobre la reciente restauración de la imagen Titular de la Parroquia y
Patrón de Castilleja del Campo que, Miguel Ángel Rodríguez Luque, Hermano Mayor
de la Hermandad Sacramental, San Miguel
y Ntra. Sra. del Buen Suceso ha redactado para su publicación en Cronista de la
Villa.
Tras las fiestas patronales del año 2013,
la Junta de Gobierno de la Hermandad adoptó la decisión de proponer al Cabildo
de hermanos que se realiza anualmente en el mes de diciembre, la restauración
del que es, a la vez, Titular de nuestra parroquia y de nuestra Hermandad. Nos
llevó a tomar la decisión la constatación desde hacía ya varios años, al menos
para los que manejamos la Imagen de forma más cercana para los cultos,
procesión, etc. de que se hacía necesaria una intervención para corregir defectos
tales como dedos fracturados en ambas manos, grietas marcadas en la coraza a la
altura del pecho y abdomen, ojo izquierdo pintado sobre una pasta
indeterminada, daños en la policromía del rostro y en las manos por el sistema
de sujeción de la espada y el peso, daños en la cabeza provocados por el
sistema de sujeción del casco y de la diadema, etc.
En este Cabildo de Cuentas de diciembre de
2013 se informó a los hermanos del TAC realizado gratuitamente a San Miguel, el
día 16 del mes anterior, en la Clínica Sagrado Corazón de Sevilla, como medida
previa y necesaria para el conocimiento estructural de la escultura ante el
proceso de restauración que se proponía. En el Cabildo se acordó por los hermanos que la Junta de Gobierno
encargara dos propuestos de intervención a técnicos cualificados en
restauración de obras de arte aportándoles a ambos idénticas fuentes radiográficas
(TAC), fotográficas y documentales como apoyo para la elaboración de las
mismas.
Tras meses de intenso trabajo, el día 19 de
octubre de 2014 se convocó Cabildo extraordinario de la Hermandad en el que se
presentaron las dos propuestas de intervención solicitadas, firmadas, la
primera, por Pedro E. Manzano Beltrán, conservador restaurador de obras de arte;
y la segunda por Juan Manuel Miñarro López,
especialista en escultura e imaginería polícroma., ambos con gran reputación en
el ámbito científico relacionado con la restauración y conservación de
escultura polícroma en madera. Tras dar a conocer detalladamente las dos
propuestas, se procedió a votar por los hermanos presentes, resultando elegido
el proyecto de Pedro E. Manzano Beltrán, por amplia mayoría.
Rápidamente se procedió a comunicar la
decisión al técnico seleccionado para realizar el trabajo, así como al autor de
la propuesta no elegida, agradeciendo éste a la Hermandad el gesto muy
gentilmente. También, el 20 de octubre de 2014 se procedió a comunicar lo
acordado a la Delegación Diocesana de Patrimonio Cultural del Arzobispado de
Sevilla para que diera el visto bueno preceptivo al trabajo que se pretendía
llevar a cabo. El 3 de noviembre se firmó la autorización y sin más demora, a
instancias del restaurador, el día 11 de noviembre de 2014 se procedió al
traslado del Arcángel en la furgoneta cedida por el Ayuntamiento de Castilleja del
Campo al taller de la trianera calle Pureza. Allí ha permanecido ocho meses y
veinte días, hasta su regreso al pueblo entrada la noche del día 31 de julio de
2015, traslado que se realizó en la furgoneta cedida por Miguel Ángel y
Almudena.
Durante todo este tiempo, muchas han sido
las visitas que he realizado, sólo o acompañado por los miembros de la Junta de
Gobierno que han querido comprobar “in situ” la evolución de los trabajos.
Muchos han sido los mensajes, las llamadas telefónicas, los whatsapps para
ponernos de acuerdo en asuntos que requerían el quórum de la Junta para seguir
avanzando. Pero ha valido la pena. A pesar de que a veces, las visitas, de
antemano, sabíamos que podían resultar duras por el estado de la Imagen en el
periodo central del trabajo en el que se procedió a abrir la parte posterior
del manto y a separar la mascarilla del rostro para poder reparar el ojo de
cristal dañado, a pesar de ello, ha sido de las experiencias más
gratificantes que he vivido. La profesionalidad de Pedro Manzano y su
exquisito trato han contribuido en mucho a crear un clima fluido de
comunicación recíproca muy favorable para la evolución del trabajo.
Quiero dejar claro que, desde el principio,
la Junta de Gobierno tuvo claro que la intervención debía contemplar no sólo la
parte externa de la escultura, la policromía, los barnices, sino también la
estructura interna de la Imagen, su
consolidación y tratamiento integral.
De este modo, San Miguel ha visto como el
tronco de pino macizo que conformaba su núcleo estructural era ahuecado, y a la
vez tratado de desinsectación, para
evitar las tensiones que provocaban las grietas o fendas que marcaban su coraza.
Ha visto también como la mascarilla de su rostro ha sido separada de su cabeza
para poder recuperar el ojo de cristal izquierdo que, aunque hecho trizas, se
conservaba dentro y ha vuelto a su lugar una vez recuperado magistralmente. Y
también como los dedos de sus bellas manos han vuelto a ser fuertes para
sostener la espada y la balanza con el apoyo de nuevos sistemas de sujeción
menos agresivos para la policromía de las mismas. Y como su manto rojo y su
faldellín verde recobraban el brillo de los estofados tras la limpieza
exquisita de sus superficies. Como la policromía de la encarnadura de brazos y
piernas recobraba la luminosidad perdida. Como sus bellas sandalias de guerrero
a lo romano recobraban su tonalidad, y la coraza volvía a ganar protagonismo con su nueva
tonalidad en armonía con el conjunto general de la Imagen, Como sus alas
ganaban en sistema de sujeción de aleación mucho más seguro y adecuado que el anterior.
Pero también hemos visto como de forma sencilla
y a la vez altiva y solemne volvía con un nuevo atributo en su mano izquierda,
un pequeño escudo argénteo con su lema “Quis Sicut Deus” (Quién cómo Dios) que por indicación del restaurador se ha incorporado al ser muy
común en la iconografía de San Miguel y ayudar a disimular la sujeción de la
balanza con una mano que parecía estar hecha para ello.
Y he dejado para el final su angelical
rostro. Rostro que hasta muy al final no nos ha mostrado su belleza de rasgos
orientalizantes una vez limpio de barnices, repintes y pátinas innecesarias. Un
rostro que llama poderosamente la atención del que lo contempla y que ha
recobrado la serenidad y la dulzura de antaño que todos añorábamos en nuestro
Patrón.
Esperamos que el resultado sea de vuestro
agrado. Que el Arcángel San Miguel os bendiga. Muchas gracias a todos los que
habéis colaborado en esta preciosa tarea, pero muy especialmente al Excmo.
Ayuntamiento de Castilleja del Campo por su colaboración, sin ella no hubiera
sido posible llegar a la línea de meta.
Crónica
071. Castilleja del Campo, martes 29 de septiembre de 2015