Por
Juan Carmelo Luque Varela, Cronista oficial de la Villa
En
la mañana del 25 de febrero en Castilleja del Campo se celebró el primer acto
conmemorativo, adelantándose al Día de Andalucía, organizado por el Centro de
Educación Infantil Juan de Mairena. Sencillo y entrañable, fue protagonizado
por niños que se sienten andaluces desde su más tierna edad. El angelical
alumnado: niños y niñas de 3 a 5 años, dirigidos por las maestras Pruden y
Luna, desgranaron a coro un canto a los campos, mares pueblos y ciudades
andaluzas. Acto cultural que finalizó con el himno andaluz, coreado por quienes
forjaran el futuro de Andalucía, mientras hondeaban banderitas verde y blanca. El acto se
desarrolló en la puerta del citado colegio bajo la atenta mirada de un grupo de
familiares respetando las obligadas medidas de seguridad. Esta es una de las
noticias que marcaran el final de febrero
Aunque,
según establece el Estatuto de Autonomía, la bandera de Andalucía hondea de forma permanente en uno de los
mástiles de la balconada de la Casa Consistorial junto a las insignias de la Comunidad Europea, la de
España y la bandera local, se ha colgado otra de gran tamaño para conmemorar el
28F, festividad de la Comunidad Andaluza. En este sentido, La Corporación
Municipal hizo público un comunicado invitando a la ciudadanía a colgar en sus
balcones y ventanas la bandera verde, blanca y verde, insignia de nuestra
tierra, para celebrar el Día de Andalucía en este año tan especial y atípico.
28 F, una conmemoración que este año no se celebrará con sus correspondientes actos públicos porque así lo ha impuesto la pandemia del coronavirus, que entra en su segundo año sin tomarse tregua alguna en su propagación. Y es así porque todos somos potencialmente vectores de un virus con nombre propio: covid-19, por ello debemos asumir la responsabilidad de cuidarnos los unos a los otros, por nuestra salud y por la de todos. No olvidemos que esta pandemia destruyó 622.600 puestos de trabajo en 2020 y, según alertan las ONG, una cuarta parte de la población española podría estar viviendo en la pobreza en los próximos años.
Con este panorama llegamos a las puertas del Día de Andalucía, fecha donde hay algo más que se asocia al 28 de febrero. Es el nombre de un hombre considerado oficialmente como “padre de la patria andaluza” y máximo exponente del Andalucismo o Nacionalismo andaluz, Blas Infante. Infante alternó las tareas de notario, historiador, antropólogo, musicólogo, escritor y periodista, además de ser un lector voraz y gran conferenciante. Se editaron 14 obras suyas y llegó a escribir más de 3.000 manuscritos. Pero sobre todo, los andaluces recuerdan a este hombre porque fue el autor del Himno de Andalucía que, entre cuyas estrofas, destacó la fuerza del pueblo andaluz, ese pueblo honrado y trabajador que un 28 de febrero de 1980 decidió constituirse en Comunidad Autónoma.
Y
a este pueblo andaluz, entre otras cosas, le dijo el poeta a su manera:
“Urge
por eso, en tan inciertos días / construir puentes, destruir barreras, / que
sea la verdiblanca la bandera / de la cultura, el pan y la alegría. / De Huelva
y de Jaén eran mis padres, / mis amigos don nadies sin fronteras, / cuando la
última copa me descuadre / regresaré a mi olivo y a mi higuera. / Jaén,
Sevilla, Córdoba, Granada, / Málaga, Huelva, Cádiz, Almería, / duendes de la
memoria enamorada / mantras del corazón y la utopía.
Mejor
pasar a limpio los pecados, / los eres, la ignorancia, el desempleo, / Andalucía
sabe demasiado / lo ingrato que es bailar con el más feo. / La ilustración
brilló cuando las cortes / de Cádiz se metieron en faena, / después un rey
felón vendido al norte / puso de moda el vivan las caenas. / Parias
hambrientos, pijos de mal vino, / guerras civiles, ninis sin memoria, / no
conviene olvidar, por si la historia, / que aquí nacieron Lorca y su asesino.
Por
eso a los tribunos que gobiernan / hoy les pido, perdónenme que insista, / una
patria decente, audaz, moderna / humana, justa, libre y progresista. / Y como
no me ponen los sectarios / ni me frenan atávicos prejuicios / soñar un paraíso
hospitalario / al sur del sur es ya mi único vicio.
Bendito
veintiocho de febrero / lo dice un hijo pródigo que sabe / que aquí no sobra
nadie, compañeros, / que todo el mundo en esta tierra cabe. / Andaluz y
español, más europeo / que el virus que nos quiere separar, / por sí dice ese
himno en el que creo / y por el mundo, y por la humanidad”.
Resumen
extraído del canto de Joaquín Sabina en respuesta a la concesión de la medalla
de hijo predilecto de Andalucía, el 28 de febrero de 2016.
Noticias
locales 115. Castilleja del Campo, viernes 26 de febrero de 2021