Por
Juan C. Luque Varela, Cronista oficial de la Villa
La
historia y la cultura de un pueblo la escribe su gente. Sin embargo están
perdiéndose muchas riquezas de la cultura popular porque apreciamos más lo que suene a
novedoso, moderno y recién llegado de otras culturas, aunque sea de poco
valor, vacío y perecedero. En el caso que nos ocupa no fue es así, el
movimiento social que supuso la entrada del fútbol como nuevo deporte arraigó profundamente en España.
Por
ello y ante la evidente decadencia en la que se encuentra la práctica de este también
en nuestra localidad. deporte en nuestro pueblo, a pesar de su dilatada
trayectoria y haber tenido un club federado, bien merece que se recuerde su historia. Y no solo por recuperar aquella
tradición, también para reconocer y
valorar a tantas personas que dejaron su juventud junto al polvoriento, ondulado y duro piso de
aquel campo de fútbol llamado <<Pozo Aguao>>. Este primer artículo
es una introducción al tema central y los inicios de la afición en nuestro
pueblo.
EL FOOT-BALL ENTRA EN ESPAÑA
Hacia
finales del siglo XIX el fútbol como deporte se introduce en España a través de
los trabajadores británicos de las minas de Riotinto en Huelva. El primer club español legalmente establecido fue el Huelva
Recreation Club que se fundó en 1878. Tomando su nombre definitivo de Real Club
Recreativo de Huelva en 1907. Fue el propio <<Recre>> quien también
se llevó el primer trofeo disputado en España, la Copa de la Diputación de
Huelva en 1892, que formaba parte de los festejos de la IV Centenario del
Descubrimiento de América.
Un
estudio reciente -posiblemente desde la óptica de un seguidor sevillista-
asegura que el primer Match de Foot-ball en España se disputó en 1890 entre el
Huelva Recreation Club y el Sevilla Footbal Club, –probable origen del actual
Sevilla Fútbol Club-.
Años más tarde, con la llegada del siglo XX,
los clubes deportivos empezaron a proliferar por todo el país. Pero el gran
cambio en el fútbol español llega en 1926, tras un largo proceso de debate,
donde se aprueba el Primer Reglamento de futbol Profesional y sienta las bases
para el nacimiento del Campeonato Nacional de Liga, cuya primera edición se
disputó en 1929.
¿Habría despertado en Castilleja del Campo la afición al novedoso
deporte en aquellos años?
LOS PIONEROS EN EL NUEVO DEPORTE
Por el inexorable paso del tiempo, ya
no existen las personas que por aquellos años hubieran practicado el balón-pie,
–traducción del footbal inglés- ni datos que lo documente. En la actualidad
solo podemos recurrir a los recuerdos transmitidos por nuestros padres y
abuelos para atestiguarlo. De estas transmisiones orales, lo que podemos sacar
en claro son hipótesis y datos sueltos que, eso sí, pueden certificar que en Castilleja del
Campo, ya en los años treinta del siglo pasado,
se practicaba el moderno deporte aunque de forma esporádica, normalmente
en primavera y verano y se competía con
los pueblos del entorno.
Podremos
citar nombres de algunos de aquellos intrépidos jugadores pero no la formación
del equipo, sin embargo, a tenor de algunos datos y recuerdos, se sabe que el
primer espacio habilitado como campo para la práctica de aquel nuevo deporte
que era el fútbol, estaba situado en una finca rústica conocida por
<<Venta la Juana>>. Actualmente se localiza como el terreno que
está, en la margen derecha de la carretera en dirección a Sevilla, pasando la factoría <<Los
Vázquez>>. Otro dato nos llegó de un relato transmitido por un
antepasado, que atestiguaba cómo cada domingo, mientras unos jugaban al
fútbol, dos aficionados se desplazaban
en bicicleta a Sevilla para recoger -si había suerte- algún esférico que
sobrepasara las tapias de aquellos
estadios del Sevilla o el Betis.
Otro
dato que corrobora la práctica del
fútbol desde principios de la década de los años 30 del pasado siglo, es el listado que Narciso
Luque Romero nos facilita de aquellos pioneros que se alineaban en el primer equipo que se recuerda con el nombre
de <<El Castilleja>>. Un equipo que hizo famoso el trío de su delantera: Macedonio, Canita y
Baldomero, tanto se habló de ellos que dio tema para una cancioncilla.
Aquellos jugadores fueron: Modesto Escobar (guardameta). Macedonio Rodríguez Escobar, Manuel Luque
Romero (Canita), Baldomero Ramírez Paniagua, que años después jugaría de
portero; Adolfo Muñoz, Manuel Rodríguez (de Clemencia), José Luque (Pepe de la
rubia), Manuel Luque Romero (Perrunate), Aurelio Monge y Madrigal.
Aunque
falta uno para completar el equipo y otros suplentes, si eran todos los que aquí se
relacionan.
La
dureza del juego, la precariedad del terreno donde se desarrollaba y el
desconocimiento de las técnicas deportivas daban como resultado una infinidad
de situaciones de riesgos entre los participantes. En uno de los primeros
encuentros, un trágico incidente marcó a los jugadores de <<El
Castilleja>> de aquellos años, fue en un partido diputado en Paterna del
Campo, contra el equipo de aquella localidad. El encargado
de tirar el penalti, o una falta cerca del área (no está confirmado si fue una
u otra cosa) contra la meta de <<El Paterna>>, fue Manuel
<<Canita>>, un jugador que por su fuerza y especial toque del
balón era infalible en estas ejecuciones.
Con tanta fuerza realizó aquel desafortunado disparo, que el impacto de la
pelota en el cuerpo del cancerbero le produjo tal daño interno que desgraciadamente falleció días después.
Pasaron
algunos años y la ilusión por el nuevo deporte desaparece al igual que el
estado de derecho y las libertades de
los españoles por mor de una fratricida guerra civil. La práctica del fútbol no
se retomaría hasta bien entrados los años cuarenta del pasado siglo XX.
Ante
lo dicho, en nuestro pueblo, y podemos aventurar con bastante acierto, la
afición por aquel deporte introducido en
Huelva por los ingleses, comenzó a practicarse paralelamente con las primeras
ediciones del Campeonato Nacional de Liga,
hace unos 85 años.
-Este
trabajo es un monográfico con el título <<La Historia del Fútbol en
Castilleja del Campo>>, que tratará de la tradicional afición a este deporte, de las personas que lo
practicaron y de todos los que trabajaron en su entorno.
Para
lograr una fluidez de su lectura y no alargar los diferentes artículos, estos
se publicaran siguiendo la trayectoria cronológica de su historia-.