Dios
está aquí, junto al pueblo y su campo
Por
Juan Carmelo Luque Varela, Cronista oficial de la Villa
La
Festividad del Corpus Christi y su procesión por las calles es una celebración que se precia de ser la
tradición más antigua que se celebra en Castilleja del Campo. Se remonta al
siglo XVII y un siglo más tarde ya estaba establecida como fiesta patrocinada
por el Ayuntamiento. Al menos así consta
en el interrogatorio para la reforma de los impuestos (Catastro de Ensenada de 1750)
donde encontramos, en la respuesta nº 25 que relaciona los diferentes gastos públicos
de la Villa, la siguiente redacción: <<Gastos que tiene
que satisfacer el Común (…) y la Fiesta de Corpus y Candelaria>>.
La
celebración del Corpus y su tradicional procesión cuatro veces centenaria
modificó este año su acostumbrado
itinerario impuesto por las obras de saneamiento acometidas en calles y plazas que vienen afectando a la
mitad del pueblo. Ante ello, la Hermandad Sacramental de San Miguel Arcángel y
Ntra. Sra. del Buen Suceso, organizadora del evento, optó por cambiar el
recorrido y alguna otra costumbre.
Un
vecino, aprovechando esta modificación, se preguntaba ¿cómo sería la procesión
del Corpus 400 años atrás? Ante la
ausencia de documentos que lo atestigüe, podremos aventurar que discurriría por dos o tres calles de las cinco
que formaban el entramado urbano, estarían revestidas de naturaleza, saldría bajo palio,
visitaría algún altar, etc. Más o menos como en la actualidad, solo que
adaptada a su época.
Ante
las modificaciones y recorte del itinerario otros se interesan preguntando, ¿alterarán
estos cambios la tradición? Esperemos que en manera alguna, porque las
tradiciones no cambian ni pierden su
esencia por que se altere un recorrido o cambie de lugar el espacio de una celebración.
Con
las primeras luces de un brillante jueves 4 de junio, y mientras el tamborilero
despertaba el alba con su diana de gaita y tamboril, el campo llegó a
Castilleja para vestir de naturaleza las
calles y plazas que recorrería el Corpus Christi en este año 2015. Campo
sencillo como tu Señor que no elegiste oros que relumbran ni telas lujosas.
Elegiste la espiga y el racimo, cuerpo y sangre, para asomarte a nuestros campos
en la mañana de un jueves grande.
A
las 10:00 horas, finalizado el culto de la Palabra, el palio que protegía al Santísimo Sacramento
salía del templo, portaba el Cuerpo de
Cristo don Manuel Martín Riego, Párroco
único de nuestro pueblo.
Te
hiciste presente en la plaza y cercano en nuestras calles. Calles que por unas horas se transformaron con el
color del eucaliptus, la frescura de la juncia y el aroma del romero, para envolverte Señor con esta flora de los campos nuestros.
La
procesión comenzó el nuevo itinerario por Venerable Mañara (calle de los
colegios) para bajar por la Avda. de la Constitución (cuesta del Palacio). Al
llegar al cruce con la calle Antonio Machado, el Señor hizo su
primera parada en el altar de los símbolos situado en la casa de Isabel Fernández
(Isabelita de Casildo). En esta visita y antes de la oración, el oficiante
comenzó las peticiones por las necesidades del mundo. Aquí pidió por el Papa,
los obispos, los sacerdotes y la iglesia.
Abría
el cortejo el tamboril y la gaita rociera desgranando notas de la Misa de Romeros
que compusiera el desaparecido sacerdote Francisco Muñiz. Tras la Cruz de guía los niños y niñas de primera
comunión, desde aquí y hasta la presidencia, dos filas de mujeres cantando cánticos eucarísticos entonados por el director del Coro Parroquial. Tras el
palio y como es tradicional una representación de la Corporación Municipal y
los hombres del pueblo.
Tras su paso por la Plaza María Gamero Cívico, continuó por Cuatro de Diciembre
para llegar al altar de Antonio de Rita, con su artística alfombra de flor
natural. En esta parada el sacerdote pidió por las personas necesitadas, los
enfermos, los marginados, los inmigrantes y por la unidad entre padres e hijos,
en resumen por la familia.
Después
de la bendición el párroco indicó a los portadores del palio que hiciesen una
parada a la altura de la casa del vecino, Carmelo Suarez, para llevarle la
presencia del Santísimo Sacramento hasta su lecho de dolor.
Escucha
Señor el canto de tu pueblo: <<…Dios está aquí, venid adoradores,
adoremos a Cristo Redentor…>> Claro que está aquí, contigo, junto al pueblo
y sus vecinos.
A
la vuelta del <<Prao>>, finalizando la calle Cuatro de Diciembre,
la comitiva giró a la derecha para tomar la subida de la plaza de San Miguel con
dirección a la calle Ramón y Cajal. Nuevo e histórico desvío que por mor de las obras este año se ha establecido. Un tramo que descubre el campo de Castilleja en cercanía. Una
mirada, Señor.
Por
eso sabemos que vienes cercano, que nos
suena como alma de vino y cuerpo de trigo. Como también sabemos Señor que la
juncia, el romero y el eucaliptus se ofrecen a tu paso como oración vegetal,
verde y olorosa del campo.
Los
vecinos de esta calle, fieles de tu feligresía, esperaban junto al altar de
Elías Moisés, Altar del Pastorcito Divino, la ocasión de rendir pleitesía y a
Cristo Redentor una oración. En esta parada, don Manuel Martín Riego dedicó las
peticiones a la clase trabajadora en general, a los empleados de las
industrias, los trabajadores autónomos y en especial a los trabajadores del
campo.
Continuando
por Ramón y Cajal, calle del campo, se
internó por Galinda para finalizar este recorrido extraordinario en la cuesta
de Palacio. Nuevamente en el discurrir tradicional, calle de los colegios con dirección a la
Iglesia.
Al
llegar a la plaza Monseñor Oscar Romero (Plaza de la Iglesia), la Procesión
Eucarística fue recibida con el júbilo de un repique de campanas, que evocaba aquel
cantico que José Mª Peman escribiera para el congreso Eucarístico de Barcelona en
1952.
<<Como
estás, mi Señor, en la custodia/ igual que la palmera que alegra el arenal,/
queremos que en el centro de la vida,/ reine sobre las cosas tu ardiente
caridad>>.
Y
en el altar de la Hermandad, altar del pueblo que este año presidía la imagen
de San Juan, la última parada. Aquí se pidió por los feligreses y la comunidad
parroquial de San Miguel; por la Hermandad Sacramenta de San Miguel y Ntra.
Sra. del Buen Suceso y por la Agrupación Virgen de los Dolores. Por los
estudiantes que está preparando oposiciones y por los profesionales de la
enseñanza y la educación. La bendición final con el Santísimo Cuerpo de Cristo de
esta procesión de Corpus fue impartida dentro del templo.
Eran
las 11:10 horas en el reloj del pueblo.
El
cambio de recorrido ha limitado a la mitad los altares que tradicionalmente
montan los vecinos para recibir al Señor. Pero por otro lado ha favorecido la
cercanía de Dios a nuestros campos donde, de un grano de trigo nació la espiga
para hacerse pan y de la vid el racimo
de uvas para transformarse en vino, Cuerpo y Sangre Señor: Corpus Christi en
Castilleja del Campo.
Costumbres
y tradiciones 030
Castilleja
del Campo, viernes 5 de junio de 2015